Que ganas tenía de contaros como fue este año nuestra experiencia con los Reyes Magos de Oriente. Os había avanzado hace unos días antes en este post de Blogmodabebé que este año gracias a Funidelia, vendrían Melchor y Gaspar a casa a dejar los regalos bajo nuestro árbol. Mientras dormíamos y para captar ese momento dejamos nuestra cámara Instax Mini de Fujifilm. Se lo pasaron en grande con sus coronas, capas y largos trajes majestuosos, dejando los juguetes, colocando todos los paquetes bajo el árbol y haciéndose ‘selfies’ para que por la mañana, cuando Jorge se despertara, encontrara no solo los regalos sino las preciadas y preciosas fotos. ¿Queréis saber más? Pues seguid leyendo.
La ilusión de los Reyes Magos la he vivido siempre desde el estómago. Desde el lugar en el que se viven las emociones. Con ese cosquilleo y ese nerviosismo que sube por el esófago y hace que te tiemblen no solo las manos sino los labios, esbozando continuamente una sonrisa nerviosa. Esta pasada noche de Reyes viví de nuevo ese hormigueo, esa fabulosa sensación.
¿Habéis visto la película Monstruos S.A? En ella los simpáticos Sullivan y Wazowski tienen miedo de los niños. Sí, sí… No son solo los niños quienes se espantan de los monstruos que aparecen por las noches más allá de sus pesadillas, sino que son estos simpáticos seres peludos quienes temen ser vistos y tocados por los niños. Así se sienten también los Reyes Magos y esta vez os lo puedo asegurar.
Los peques se van a dormir con la ilusión de que vendrán y dejarán regalitos para ellos. No quieren despertarse para que no vean que no están durmiendo y se vayan sin dejar nada. Los Reyes no quieren que los peques se despierten y aparezcan por la puerta de la habitación a hacerles preguntas del tipo ¿Está lejos Oriente? ¿De dónde sacáis el carbón de azúcar? ¿Dónde habéis aparcado los camellos? ¿Pica mucho la barba? Y todas esas cosas que se les ocurren a los niños.
Así que dejar los regalos bajo el árbol es un trabajo arduo que tiene que hacerse a la carrera, con respeto y de manera sigilosa ¿Verdad? Pues eso que alguna vez habréis sentido, es lo que sienten los Reyes Magos con sus largas capas, sus largas barbas y sus largas melenas. Porque sus trajes son lo más y todo ha sido gracias a Funidelia que aceptó participar en esta bonita experiencia aportando hasta el más mínimo detalle. Os recomiendo esta web ahora que se acerca Carnaval. Tenéis todo tipo de trajes y para todas las edades (por cierto, ahora de rebajas).
También agradecer a Fujifilm que nos enviara su Instax Mini 25. Una cámara instantánea fantástica de altas prestaciones que lleva hasta lleva espejo para selfies, algo que agradecieron los Reyes Magos la noche del 5 de enero. No perdáis nunca la ilusión amigos y amigas. Es lo más bello de esta vida y hace que reluzcan no solo los ojos de los niños, sino también los de los mayores
Actividades para niños, Juguetes, Regalos originales
2 comentarios
Me encanta la idea y adoro esa camarita!!
Gracias Pilar, ha sido una experiencia chulísima